El nuevo papa, León XIV, anteriormente conocido como Robert Francis Prevost, ha sido elegido como el 267.º Papa de la Iglesia Católica.

Su elección marca varios hitos históricos y presenta aspectos curiosos sobre su vida y trayectoria:
1. Primer papa estadounidense: Nacido en Chicago el 14 de septiembre de 1955, León XIV es el primer pontífice originario de Estados Unidos en la historia de la Iglesia Católica.
2. Ciudadano peruano: Además de su nacionalidad estadounidense, obtuvo la ciudadanía peruana en 2015, reflejando su profundo vínculo con Perú, donde sirvió como misionero y arzobispo.
3. Raíces multiculturales: Su herencia es diversa, con ascendencia francesa e italiana por parte de su padre, y española por parte de su madre.
4. Formación académica diversa: Antes de su dedicación plena a la vida religiosa, estudió Ciencias Matemáticas en la Universidad de Villanova y posteriormente obtuvo grados en Divinidad y Derecho Canónico en Roma.

5. Experiencia misionera en Perú: Se unió a la misión agustiniana en Perú en 1985, desempeñando roles significativos como canciller de la Prelatura Territorial de Chulucanas y director del seminario agustiniano en Trujillo.
6. Cercano al papa Francisco: Fue nombrado prefecto del Dicasterio para los Obispos en 2023 por el papa Francisco, con quien compartía una visión pastoral enfocada en la cercanía a las periferias y la justicia social.
7. Elección del nombre “León XIV”: Al elegir este nombre, rinde homenaje a una línea de papas anteriores que llevaron el nombre León, siendo el último León XIII, quien falleció en 1903.
8. Multilingüe y políglota: Domina varios idiomas, incluyendo español, lo que le ha permitido conectar profundamente con comunidades de habla hispana durante su labor pastoral.

9. Educación religiosa temprana: Ingresó al seminario menor de los Padres Agustinos en su adolescencia, mostrando desde joven una vocación religiosa sólida.
10. Elección rápida en el cónclave: Fue elegido papa en la cuarta votación del cónclave, reflejando un consenso claro entre los cardenales electores.
La elección de León XIV representa una combinación de tradición y renovación, con un líder que aporta una perspectiva global y una profunda experiencia pastoral a la Iglesia Católica.