Rusia no volverá a cometer los mismos errores del pasado, como lo fue el abandono de sus intereses nacionales, declaró el presidente del país, Vladímir Putin. De acuerdo con el mandatario ruso, la soberanía de Rusia «es una garantía de libertad para cada ciudadano, nadie puede ser libre si la patria no es libre».
«La soberanía es una garantía de libertad para todos y, en nuestra tradición, uno no puede sentirse verdaderamente libre si no lo es también su pueblo, su patria, Rusia. Un poder responsable y fuerte en nuestro Estado solo servirá al pueblo de Rusia y su apoyo en las cuestiones clave de la agenda interna e internacional es la clave para el desarrollo exitoso y seguro de nuestro país como uno de los centros del mundo multipolar, ahora más justo», afirmó Putin en un concierto para celebrar el aniversario 1160 del nacimiento del Estado ruso.
El mandatario agregó que los pasados 1160 años han demostrado que para Rusia «es mortalmente peligroso debilitar su soberanía incluso por un tiempo, abandonar sus intereses nacionales». Durante estos períodos, la existencia misma de Rusia estuvo amenazada y detalló que no habrá más errores de este tipo. «Nosotros no sucumbiremos al chantaje y a la intimidación«, subrayó Putin.
Agregó que durante siglos Rusia ha sido el hogar común para personas de muchas nacionalidades y religiones. Al mismo tiempo, enfatizó que, a pesar de las múltiples invasiones, la fragmentación y la tragedia de la guerra civil, los períodos sombríos de la historia de Rusia siempre han estado seguidos por etapas de renacimiento.
«Las heroicas generaciones de nuestro pueblo superaron las dificultades, superaron todas las pruebas, crearon, acrecentaron la grandeza de nuestra patria y cubrieron con gloria sus nombres», resumió el mandatario.
Estas declaraciones llegan el mismo día en el que el presidente anunció una movilización parcial con el objetivo de defender la soberanía y la integridad territorial del país. Putin agregó que esta decisión es apropiada ante las amenazas que afrontan Rusia. Más tarde, el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, especificó que serán movilizados 300.000 reservistas, poco más del 1% de los casi 25 millones de personas con los que cuenta Rusia.